Conferencia de primavera en línea para redentoristas
y los animadores de la PGVR de Europa
El encuentro con los representantes europeos de la PGVR tuvo lugar el sábado 6 de marzo, organizado por la Comisión PGVR de la Conferencia Europea. Ante la imposibilidad de viajar por la emergencia sanitaria, el encuentro se desarrolló online a través de la plataforma Zoom y tuvo como tema central “Esperanza en tiempos de crisis”. Estuvieron presentes unas 85 personas, representadas de las diversas realidades de la pastoral juvenil local, incluido el Superior General P. Michael Brehl, coordinador de la Conferencia de Europa p. Johannes Römelt, unos padres del Gobierno general y de la Conferencia, los cohermanos responsables de los distintos Secretariados provinciales y muchos jóvenes representantes de las diferentes realidades locales. Hay muchas provincias presentes, entre ellas Roma, Nápoles, España, Francia, San Clemente, Dublín, Varsovia, Bratislava-Praga. También hay una representación de la provincia de Baltimore.
El idioma oficial fue el inglés, pero para el gran número de participantes y para facilitar la comunicación, se ofreció traducción simultánea en tres idiomas diferentes: italiano, español y polaco.
Para comenzar el encuentro de la mejor manera posible, hubo un hermoso momento de oración que insertó plenamente nuestro corazón en la disposición correcta y nos preparó para escuchar el mensaje de saludo de nuestro Superior General, el P. Michael. Después de él, el P. Gerard O’Connor, quien trajo un análisis muy preciso del mundo juvenil de hoy. También ofreció numerosos elementos de reflexión para el momento siguiente. Los participantes, de hecho, se dividieron en 10 microgrupos de 9 a 10 personas según su origen lingüístico durante unos 40 minutos. En los distintos grupos, los participantes pudieron compartir sus experiencias y reflexiones.
La síntesis de estas acciones se informaron luego en la sesión plenaria y se recogió en una síntesis general concluyente. No pudimos dejar concluir nuestro encuentro sin un último momento de oración en el que, cada uno en su propio idioma, nos dirigimos al Padre y a nuestra Madre del Perpetuo Socorro, María.
Fabrizio Podda, C.Ss.R., Italia
