Con ocasión de la fiesta del Fundador de la Congregación Redentorista, el Superior General, P. Rogério Gomes, invita a la Familia Redentorista a reflexionar sobre la vida de San Alfonso y destaca de ella algunas ideas orientadoras para ser hoy Misioneros de la Esperanza tras las huellas del Redentor.
Mirando el ejemplo del Santo, el Padre General subraya que la experiencia de Dios es el centro y fundamento de nuestra vida personal y comunitaria, de la acción misionera y de la reflexión moral. De esa realidad nace el amor a los más abandonados y un profundo sentido de la justicia social, así como el estilo de vida individual y comunitario.
P. Rogério escribe que la comunidad debe ser el lugar acogedor donde podamos realizarnos como personas y como misioneros. También señala la necesidad de perseverancia para afrontar los problemas y desafíos que encontramos en nuestra vocación y misión.
El P. General recomienda una formación constante para el trabajo misionero y para una nueva mentalidad eclesial, espiritual y teológico-moral. Escribe: “No podemos, como Alfonso, emprender un cambio de mentalidad eclesial, pastoral, espiritual y moral si no nos actualizamos y nos interesamos por la formación personal y comunitaria”.
En el 236 aniversario de la muerte de nuestro Fundador, el P. Rogério nos plantea algunas preguntas concretas: ¿Cómo estamos encarnando el carisma redentorista en nuestro ser? ¿Cómo evaluamos nuestro sentido de pertenencia a la Congregación? ¿Cómo es la calidad de nuestra vida comunitaria? ¿Cómo es nuestra relación con el voto de obediencia y el ejercicio de la autoridad?
El Padre General concluye su mensaje confiando la Familia Redentorista a María y Alfonso: “Que María y Alfonso, con su celo apostólico y su oración constante al Padre, nos animen a ser, también hoy, Misioneros de la Esperanza tras las huellas del Hijo Redentor“.
Leer el texto completo del Mensaje del P. General en la Solemnidad de San Alfonso.