Del 01 al 03 de mayo, en la Casa de Espiritualidad San Gerardo en Cotuí, Provincia Ramírez Sánchez en República Dominicana se realizó el Primer Consejo de la Conferencia de los Redentoristas de América Latina y El Caribe de las nuevas Provincias reconfiguradas. Se contó con la presencia del M.R.P. Rogério Gomes, Superior General, el P. Jairo Díaz, Consejero General y de los Superiores Provinciales de las 7 Unidades reconfiguradas de América Latina y El Caribe.
Este encuentro se realizó durante la quinta semana de Pascua en la que sigue resonando la voz del Resucitado que nos impulsa a ser sus discípulos y animadores de este proceso tan rico, tan variado, con rasgos muy concretos y que unidos al Padre labrador-trabajador y a Jesucristo su Hijo, nos ayuda a dar fruto bueno y abundante.
El encuentro se inició el día en que la Iglesia nos recordó el ejemplo de San José Obrero, como un espacio de unidad que, en medio de las diversas situaciones sociales, culturales, políticas, religiosas y de pobreza generalizada nos impulsa a abrirnos a los proyectos de Dios no siempre comprendidos, pero con la disponibilidad, como José el obrero sencillo, el varón justo del silencio que se abre a la acción.
Hemos sentido que la obra de San Alfonso ha de tener el rasgo que tanto insiste el Papa Francisco… “estar en salida”, buscar y acercarnos a los destinatarios de nuestro carisma. Nosotros como misioneros conocemos bien la vida del Pueblo de Dios desde dentro, sus fatigas y sus alegrías, sus necesidades y sus riquezas. Por eso nos sentimos fuertemente invitados y comprometidos a recuperar el protagonismo misionero redentorista que hoy nos pide ofrecer con empeño y vitalidad el siempre actual mensaje de la Redención Abundante.
Han sido días de reunión, de oración, de diálogo, de escucha, de compartir, han surgido muchos retos y desafíos y por eso necesitamos unir esfuerzos, hermanarnos y abrazar este itinerario de reconfiguración con las recomendaciones y decisiones del Capítulo General XXVI, y seguir reimaginando y afianzando el ser y quehacer redentorista en América Latina y El Caribe. ¡Misioneros para el Mundo entero! No tengamos miedo a abrazar la reestructuración y la reconfiguración con todo lo que implica.
En las 7 nuevas unidades hay realidades por resolver, también hay proyectos muy hermosos, hay muchos deseos de seguir anunciando la Buena Nueva al estilo de San Alfonso. La Congregación no avanzará sin el esfuerzo de todos, sin el compromiso de todos.
“Si no hay una nueva manera de vivir, no cambia nada, no cambia nada. Las puras estructuras no cambian nada, cambiarán las personas que dirigen las estructuras y toda cuestión, pero no hay mayor cambio”. (Cardenal Jorge Jiménez Carvajal).
Creemos que nuestro liderazgo, nuestro servicio de animación y de fraternidad ayudará a los hermanos a cambiar, algo que no es fácil, la invitación es a no dejar de intentarlo.
Hemos encomendado a la Bienaventurada Virgen María, Señora de la Altagracia y Socorro Perpetuo del pueblo Dominicano, que nos siga indicando el sendero que nos conduce al Camino, a la Verdad y a la Vida.
José Araya CSsR
