Accademia Alfonsiana es reconocida como Institutum ad instar facultatis

0
1885

Introducción

El 25 de marzo de 1957 (¡64 años!), la Congregación de Religiosos reconoció a la Academia Alfonsiana como “escuela interna de teología moral” (constituit tamquam Scholam internam publicam) bajo el cuidado de la Congregación del Santísimo Redentor. Desde este periodo hasta hoy, la Accademia ha ido ganando su autonomía hasta el último reconocimiento, gracias a la Constitución Apostólica Veritatis gaudium (VG), el 18 de diciembre de 2020, para ser reconocida por la Educación Católica como Institutum ad instar facultatis.

Recordando un poco la Historia, la Academia Alfonsiana (AA), Instituto Superior de Teología Moral, fue fundada por la Congregación del Santísimo Redentor como escuela de teología moral el 9 de febrero de 1949. La Congregación de los Religiosos la reconoce como una escuela pública interna de teología moral, confiada a la C.Ss.R y abierta al clero secular y a los religiosos el 25 de marzo de 1957; el 2 de agosto de 1960, la Congregación para los Seminarios y las Universidades, con la aprobación del Papa Juan XXIII, incorporó la AA a la facultad de teología de la Universidad Pontificia Lateranense, tras haber aprobado legalmente sus Estatutos, como Instituto Superior de Teología Moral, con autonomía propia; el 22 de octubre de 1969, la Sagrada Congregación para la Educación Católica aprobó el programa propuesto por la AA en aplicación de la Normae quaedam (20 de mayo de 1968): Licenciatura especializada (2º ciclo) y Doctorado (3º ciclo) en Teología Moral.

En base al decreto de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, nº 1960/57 del 25 de marzo de 1957 se inició el 13 de abril de 2018 los trabajos para el reconocimiento civil, un requisito ante el estado italiano. El 19 de abril de 2018, se presentó a la Congregación de los Religiosos, la solicitud de reconocimiento. El 26 de septiembre de 2018, la Congregación para la Educación Católica, en respuesta al Prot. N. 63488/18 de 26 de septiembre de 2018, dio su conformidad para que el Instituto Superior de Teología Moral “Accademia Alfonsiana”, incorporado a la Universidad Lateranense, fuera erigido por las Autoridades competentes como organismo eclesiástico civilmente reconocido.

Decreto del 1957

El 10 de octubre, el Gran Canciller, Cardenal Angelo De Donatis (N. 63488/18/GC), comunica al Superior General que la Congregación para la Educación Católica, el 26 de septiembre de 2018, con Prot. N. 810/79, también ha dado su asentimiento para el reconocimiento civil. El 21 de diciembre de 2018, la Congregación para la Educación Católica expide el certificado Prot. 810/79 que acredita la personalidad jurídica canónica de la AA con el cual el representante legal de la misma puede iniciar, en la prefectura de Roma, el reconocimiento civil de la Academia Alfonsiana como entidad eclesiástica.

El 06 de junio de 2019, la Congregación para la Educación Católica, de conformidad con los artículos 2 y 10 del Acuerdo para la revisión del Concordato entre la Santa Sede y la República Italiana, otorgó su consentimiento para el reconocimiento de la personalidad jurídica civil de la AA (Prot. 810/79). Este documento ha sido enviado al Ministerio del Interior y firmada el 20 junio de 2019.

El 18 de diciembre de 2020, la Accademia Alfonsiana, es reconocida por la Congregación para la Educación Católica como Institutum ad instar facultatis. En los nuevos Estatutos de la Pontificia Universidad Lateranense aprobados (el 5 enero de 2021) se inserta la Academia Alfonsiana, junto con el Patristicum y el Claretianum como centros especiales de investigación (Cf. VG, Ord. Art. 2, Proemio 5) con el fin de cultivar y favorecer la formación teológica especializada, desarrollar la investigación científica y lanzar a los estudiantes a la enseñanza a la luz del magisterio de la Iglesia.

Teniendo en cuenta las directrices de la Constitución Veritatis Gaudium y el nuevo estatus jurídico de la Accademia Alfonsiana, los Estatutos que ya habían sido presentados a la Congregación para la Educación Católica en 2020, fueron revisados y aprobados para su presentación el 11 de marzo de 2021 por el Consejo de Profesores y el 18 de marzo por el Consejo Académico.

  1. La importancia de ser un Institutum ad instar facultatis

La Veritatis Gaudium afirma que “una institución a la cual la Congregación para la Educación Católica haya conferido el derecho de otorgar solo el grado académico del segundo y/o del tercer ciclo se le denomina Instituto ad instar Facultatis” (VG, art. 6). ¿Qué significa esto?

  • Que tenemos una autonomía didáctica, administrativa y de gestión en la cual la Pontificia Universidad Lateranense no puede interferir. Significa que estamos en igualdad de condiciones con cualquier otra facultad del mundo. Obviamente, esto amplía nuestra responsabilidad con respecto al servicio formativo que prestábamos anteriormente. Debemos ir más allá.
  • Ser reconocido como centro de excelencia académica: tradición histórica, investigación, enseñanza y calidad del trabajo académico;
  • Poder conferir títulos académicos con la autoridad de la Santa Sede (VG, art. 70);
  • tener plenitud jurídica ante la Congregación de la Educación Católica, la Pontificia Universidad Lateranense y la Congregación del Santísimo Redentor;
  • Implicarse más en la Vida de la Pontificia Universidad Lateranense;
  • Posibilitar la doble inscripción de un estudiante en más de un centro universitario y la tesis doctoral puede ser publicada en formato electrónico;
  • Ofrecer cursos de formación con la certificación de diplomas;
  • Asociarse con otros institutos de teología moral y también redentoristas;
  • Posibilitar acciones para proyectos Fundraising hasta el momento impedido por causa de ser el mismo ente eclesiástico Congregación-Accademia.

Este reconocimiento es una recompensa al compromiso de la Congregación del Santísimo Redentor con la educación, dándonos una considerable visibilidad y acreditándonos como un centro de máxima calidad. El propio Papa Francisco ha impulsado este reconocimiento. En sus palabras en ocasión de los 70 años de la fundación de la Academia el 09 febrero 2019, dice:

La fidelidad a las raíces alfonsianas de vuestro Instituto os pide ahora un compromiso todavía más convencido y generoso con una teología moral animada por la tensión misionera de la Iglesia ‘en salida’. Como San Alfonso, siempre debemos evitar dejarnos aprisionar por posturas de escuela o por juicios formulados ‘lejos de la situación concreta y las posibilidades reales’ de las personas y de las familias. Asimismo, es necesario protegerse contra una ‘idealización excesiva’ de la vida cristiana que no es capaz de despertar la ‘confianza en la gracia’ (cf. Exhortación apostólica post sinodal Amoris Laetitia, 36). En cambio, escuchando con respeto la realidad y tratando de discernir juntos los signos de la presencia del Espíritu, que genera liberación y nuevas posibilidades, podemos ayudar a todos a recorrer con alegría el camino del bien. Las realidades para escuchar son, ante todo, los sufrimientos y las esperanzas de aquellos que las mil formas del poder del pecado continúan condenando a la inseguridad, a la pobreza y a la marginación. San Alfonso se dio cuenta muy pronto de que no se trataba de un mundo del cual defenderse y menos aún al que condenar, sino sanar y liberar, imitando la acción de Cristo: encarnarse y compartir las necesidades, despertar las expectativas más profundas del corazón, asegurar de que cada uno, por frágil y pecador que sea, está en el corazón del Padre Celestial y es amado por Cristo hasta la cruz. El que está tocado por este amor siente la urgencia de responder amando.[1]

  1. Presente em los 150 años del doctorado de Santo Afonso

A lo largo de estos años, la Academia ha tratado de ser fiel a su propósito: pensar una teología moral a la luz de la Palabra de Dios y de la benignidad pastoral. No siempre ha sido fácil llevar a cabo esta misión a lo largo de estos tiempos. Sin embargo, el Espíritu, el gran timonel, la guía, le da la capacidad de leer los signos de los tiempos. Además, el espíritu inquieto de San Alfonso continúa su provocación para reflexionar sobre una moral más inclusiva que llegue al corazón de los hombres y mujeres heridos de hoy. Recibir el reconocimiento Institutum ad instar facultatis es un regalo al celebrar el 150 aniversario del reconocimiento del doctorado de San Alfonso. Conocemos bien las dificultades de este proceso y también lo que significa para nosotros los redentoristas.[2] Por lo tanto, se abren nuevos caminos y, con esperanza, como auténticos hijos de Alfonso seguiremos adelante en esta importante misión de anunciar el Evangelio a través de la teología moral. No podemos parar… ¡es la propia naturaleza de ser redentorista!

Como en todo el mundo, la pandemia del SARX-COVID19 afectó a la Academia en varias realidades: financiera, didáctica, número de estudiantes, posibilidad de encuentros, etc. Pero con el compromiso con el Evangelio y con el mundo herido, a través del celo pastoral recibido de Alfonso, no renunciará a su misión, sino que la llevará adelante con fe, esperanza y amor.

Padre Rogério Gomes, C.Ss.R
http://lattes.cnpq.br/3342824164751325


[1] FRANCISCO. Discurso del Santo Padre Francisco a los profesores y alumnos de la Academia Alfonsiana, Instituto de Teología Moral. http://www.vatican.va/content/francesco/es/speeches/2019/february/documents/papa-francesco_20190209_accademia-alfonsiana.html

[2] Cf. ORLANDI, Giuseppe. La causa per il dottorato di S. Alfonso: Preparazione, svolgimento, ripercussioni (1866-1871), in Spicilegium Historicum 19 (1971) 25-256; DONATO, Antonio. “tutto… è opera di Dio”. Il dottorato di Sant’Alfonso e la necessità ri-maturata di ritornare sempre alla ‘fonte’ e alle alle ‘fonti’, in Spicilegium Historicum 69 (2021) 29-54.