(Desde la perspectiva de la Viceprovincia de Malasia y Singapur)
El Encuentro Juvenil Alfonsiano inaugural (AYG 2024) en Sumba, Indonesia, dejó una huella indeleble en las vidas de los 12 delegados de la Viceprovincia de Malasia y Singapur. El encuentro reunió a jóvenes de diferentes países y culturas, unidos por su fe y su deseo de conectarse con los demás. Para muchos, la experiencia fue un viaje de descubrimiento, crecimiento y renovación espiritual.
Llegada y actividades iniciales
Los jóvenes malayos llegaron a Singapur el 26 de junio y fueron recibidos con una cálida bienvenida. Disfrutaron de un evento el 27 de junio, seguido de una misa de recaudación de fondos y comisión. Esta fase inicial marcó la pauta de su viaje, que continuó cuando partieron hacia Sumba el 29 de junio para participar en la AYG 2024.
Experiencia de alojamiento en familia: una ventana a la simplicidad y la conexión
Del 30 de junio al 2 de julio, los delegados disfrutaron de alojamiento en varias familias anfitrionas en toda Sumba. Para muchos de estos jóvenes que viven en la ciudad, esta fue una experiencia reveladora. Acostumbrados al ajetreo y el bullicio de la vida urbana, se encontraron en entornos serenos y llenos de naturaleza con conectividad limitada a Internet. Este entorno fomentó una comunicación significativa y una conexión con sus familias anfitrionas, quienes los recibieron con bailes tradicionales y cálidas sonrisas, creando una experiencia compartida que sentó las bases para la reunión.
Desfile e Intercambio Cultural
El 3 de julio, los participantes se trasladaron a la sede principal y dieron inicio al evento con un vibrante desfile de 4 kilómetros. El desfile mostró la energía y el entusiasmo de los jóvenes, con cada país ondeando con orgullo sus banderas nacionales y cantando sus vítores únicos. La velada terminó con una presentación cultural que destacó el rico patrimonio de Indonesia.
Formación y misión: profundizar la comprensión y la inspiración
El 4 de julio estuvo dedicado al tema “Una Familia”, ayudando a los jóvenes a comprender su lugar dentro de la gran familia Redentorista. A través de sesiones de intercambio, oradores invitados como la Sra. Portia de Cebú y las ideas del P. Gerard Louis de Singapur, los delegados exploraron el significado de unidad y comunidad. Por la tarde, el foco se centró en “Una Misión”, con el P. Ivel que tuvo la charla sobre San Clemente, que inspiró a los jóvenes a aceptar su misión a pesar de los desafíos, culminando con una eucaristía y una noche de celebración con presentaciones culturales de varios países.
Empoderamiento y crecimiento espiritual
El 5 de julio, el P. Rogério Gomes (Superior General) se dirigió a los jóvenes animándolos a convertirse en “Jóvenes Misioneros de la Esperanza”. Enfatizó la importancia de una vida espiritual arraigada en la palabra de Dios y los llamó a ir más allá de las fronteras locales, llevando su misión y entusiasmo al escenario global. Nuestros delegados dirigieron los rompehielos con juegos y canciones durante toda la sesión, reuniendo a los jóvenes con una sensación de vitalidad.
De regreso después de la AYG
Cuando los delegados regresaron a casa, reflexionaron más profundamente sobre sus encuentros personales. La experiencia de alojarse en casas de familia, que los expuso a una forma de vida más sencilla, tuvo un profundo impacto. Reconocieron los desafíos que enfrentaron, pero también el crecimiento que experimentaron.
Melfred, uno de los participantes, resumió la experiencia como “llena de amor y recuerdos inolvidables”. Emilia se hizo eco del sentimiento y dijo que se sentía como en casa, rodeada por la calidez y hospitalidad de los jóvenes de Singapur e Indonesia. Diane, Sharvin y Brooklynn compartieron sentimientos similares y expresaron gratitud por la oportunidad de conocer gente nueva, experimentar diversas culturas y sumergirse en el hermoso paisaje de Sumba.
Karla describió el AYG 2024 como un “evento memorable y sensacional” que la acercó a su fe y a los demás. Christelle, que asistió a su primera reunión de jóvenes redentoristas en el extranjero, encontró la experiencia reveladora y transformadora. Ella atribuyó el mérito a la sencillez, la generosidad y el amor de su familia adoptiva y de los lugareños por inspirarla a ser más apreciativa y agradecida.
Emmanuel y Verona hablaron sobre la sencilla experiencia de ver la simplicidad de la vida en Sumba y la alegría genuina en las sonrisas de los lugareños. Se dieron cuenta de la importancia de la gratitud, el aprecio y de transmitir alegría a los demás, independientemente de las circunstancias.
El AYG 2024 fue más que un evento: fue una experiencia transformadora, un testimonio del poder de la unidad, el amor y la misión de los Redentoristas. Estos delegados ahora llevan consigo los recuerdos, las lecciones y la inspiración para difundir la alegría, la gratitud y el Evangelio a los demás, convirtiéndose en los Jóvenes Misioneros de la Esperanza que el P. El general les había exhortado a serlo.
Jacelyn Kiersten Pang
Coordinador de Misión Pastoral y Líder de NST
