(Saskatoon, Canadá 2 de junio, 2016) – La comunidad redentorista y los redentoristas Asociados de Saskatoon (Canadá) han organizado una Misión en la Parroquia de Santa María para celebrar el 150 aniversario del icono de Nuestra Madre del Perpetuo Socorro, confiado a la Congregación del Santísimo Redentor (Redentoristas). La misión estuvo encabezada por el obispo Bryan Bayda C.Ss.R.
Durante la Misión de tres días en la parroquia, desde el 2 hasta el 4 de mayo de 2016, los feligreses de las parroquias de Santa María y de Guadalupe, incluyendo la comunidad hispana, la Saints Peter & Paul Ukrainian Catholic Church y otras parroquias en Saskatoon se reunieron para escuchar a Mons. Bryan Bayda, su predicación y reflexión sobre el icono hermoso de amor; para rezar el Rosario, cantar himnos y pasar un momento de comunión.
En la celebración de la diversidad multi-cultural que se encuentra en nuestra parroquia, cada noche de la misión se ha dado a los varios grupos étnicos la oportunidad de dirigir el rezo del Rosario, un himno en honor de Nuestra Santa Madre, y las oraciones bien conocidas (Padre Nuestro y el Ave María) en su lengua nativa. Ha sido una experiencia muy particular y profunda poder escuchar el rosario y las oraciones conocidas en los diferentes idiomas y durante esto, oír también las similitudes en las lenguas.
La misa, al final de la misión, concluyó con la bendición de las diferentes imágenes marianas que las personas han traído (foto de la parte superior).
Para dejar un recuerdo de la misión, las paredes de la iglesia y el salón parroquial de Santa María fueron cubiertos de iconos de Nuestra Madre del Perpetuo Socorro que fueron dibujados y coloreados por los niños de diferentes escuelas católicas de Saskatoon. Debajo de cada imagen, algunas realmente bellas, había una oración escrita en diferentes idiomas por los niños. Ha sido muy emocionante leer algunas de las oraciones escritas por los niños pidiendo por la paz en el mundo, por los enfermos, por sus seres queridos, por la paz en sus familias, por sus amigos, por sus mascotas, etc. fue muy emotivo, hasta las lágrimas en los ojos de muchos que rezaron por estos niños y sus intenciones especiales.
(por padre Ciro Perez, C.Ss.R.)
