¡Les deseo a todos una santa y alegre Navidad! Michael Brehl C.Ss.R.

0
2006

“el Angel les dijo: No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo” (Lucas 2,10)

Queridos hermanos, hermanas, misioneros laicos, asociados y amigos,

¡En nombre del Gobierno General, les deseo a todos una santa y alegre Navidad! Una vez más, escuchamos juntos las palabras del ángel que nos trae esta buena noticia de gran alegría: “Hoy les ha nacido un salvador que es el Mesías y el Señor … Encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre.”

Como el Papa Francisco nos recordó esta semana: “Cuando Dios quiso invertir los valores de este mundo, se hizo pequeño, en un establo, con el más debil, con los pobres, con los marginados … La pequeñez … la pequeñez de este Dios … “.

¿Porqué esta “pequeñez de Dios”? El Beato Papa Pablo VI explicó este misterio de la Navidad en 1971: “Dios se ha hecho el más pequeño, el más frágil y débil de los seres. ¿Por qué? Porque de esta manera nadie tendría vergüenza de acercarse a él, nadie tendría miedo, todo el mundo se acercaría a él, de modo que no habría ninguna distancia entre nosotros y él”. Como escribió San Alfonso en su Novena de Navidad, el amor y sólo el amor es la razón de la encarnación.

La pequeñez de Dios es la solidaridad de Dios con nosotros en nuestro mundo herido. Dios se vuelve uno con los más pequeños de la tierra – con los refugiados y los migrantes, con los sin techo y los pobres, los jóvenes y los ancianos, con los que tienen miedo y los que sufren. El Redentor no llega hacia nosotros como un conquistador, sino como un niño. Este niño nos invita a la misma solidaridad con el otro y con todo el mundo.

Juntos, buscamos vivir nuestra vocación misionera como testigos del Redentor: en solidaridad para la misión en un mundo herido.

Que Dios los bendiga y todos ustedes pueden amar con la paz y la alegría, la reconciliación y la esperanza. María nos enseña a reflexionar sobre este misterio y conservarlo como un tesoro en el corazón.

Su hermano en el Redentor,

Michael Brehl, C.Ss.R.