Mensaje del Superior General a la familia Redentorista

0
3204

TESTIGOS DEL REDENTOR
Solidarios en la misión en un mundo herido

Queridos hermanos y hermanas en nuestro Redentor Jesús,

El 1 de septiembre de 2017, celebraremos una vez más la Jornada mundial de oración por el cuidado de la creación, instituido para la Iglesia Católica por el Papa Francisco en 2015. Escribo este breve mensaje para animar a todos para celebrar este día – y para recordarlo en la Eucaristía del fin de semana (2-3 de septiembre).
Recordamos la preocupación del 25º Capítulo General que ha invitado a todos a promover y profundizar el espíritu de la Laudado Sí como parte esencial de nuestro ser Testigos del Redentor (Capítulo General XXI, 12ª Decisión). El mundo, nuestra “casa común”, también se ve perjudicado por la explotación y el abuso de la ecología y el medio ambiente.

Ofrezco la siguiente reflexión del Papa Francisco sobre esta Jornada Mundial de Oración por el cuidado de la Creación:
Como cristianos, queremos ayudar a resolver la crisis ecológica que está experimentando actualmente la humanidad. Al hacer esto, primero debemos redescubrir nuestro rico patrimonio espiritual de las razones profundas de nuestra preocupación por el cuidado de la creación. Siempre hay que tener en cuenta que para los que creen en Jesucristo, la Palabra de Dios que se hizo hombre para nuestra salvación, “la espiritualidad no está separada del cuerpo, o de la naturaleza o de la realidad de este mundo, sino más bien vive con ellos y en ellos, en comunión con todos los que nos rodean “(Laudato Si’, 216). La crisis ecológica es una llamada a una profunda conversión interior: “una conversión ecológica, que implica dejar brotar todas las consecuencias de su encuentro con Jesucristo en las relaciones con el mundo que los rodea. Vivir la vocación de ser protectores de la obra de Dios es parte esencial de una existencia virtuosa, no consiste en algo opcional ni en un aspecto secundario de la experiencia cristiana.” (Ibid., 217).

El Día Mundial de la Oración para el cuidado de la creación ofrecerá a los creyentes como a las comunidades la oportunidad adecuada para reafirmar la vocación personal de ser administradores de la creación, agradecer a Dios por la maravillosa obra que ha confiado a nuestro cuidado, y pedir su ayuda en la protección de la creación, así como su perdón por los pecados cometidos contra el mundo en el que vivimos. La celebración de este día, en la misma fecha con la Iglesia ortodoxa, será una valiosa oportunidad para presenciar nuestra creciente comunión con nuestros hermanos y hermanas ortodoxos. Vivimos en una época en que todos los cristianos se enfrentan a los mismos retos decisivos, a los que debemos responder juntos para ser más creíbles y eficaz. Es mi esperanza que este Día implicará de alguna manera las otras Iglesias y Comunidades eclesiales, y la celebrarán en unión con iniciativas similares del Consejo Mundial de las Iglesias. (Carta, 6 de agosto de 2015)

Dios nos bendiga y a este mundo herido, nuestro hogar común, como testigos del Redentor en la solidaridad!

Vuestro hermano en el Redentor,

 

Michael Brehl, C.Ss.R.