Scala News comparte una breve reseña de la llegada de los misioneros redentoristas a Honduras, su trabajo y expansión. Posteriormente la llegada a la Parroquia San Antonio de Padua, que en esta ocasión recuerda 25 años de su fundación.
Los Misioneros Redentoristas (españoles) llegaron a Honduras en 1928 y se establecieron en Comayagua. Años más tarde, se trasladaron a Tegucigalpa, a la emblemática e histórica Iglesia de Los Dolores.
Por muchos años, esta iglesia fue el centro de acogida para tantos misioneros redentoristas (españoles) que se desplazaban por diversas regiones del occidente, oriente y centro de Honduras, predicando misiones.
La predicación de misiones itinerantes y populares ha sido el trabajo predominante de los redentoristas en este país desde su llegada en 1928. Con el transcurso de los años, y debido a la disminución de vocaciones, especialmente de España, sumado al envejecimiento y las enfermedades de los misioneros, su actividad de misiones itinerantes disminuyó considerablemente. Sin embargo, el espíritu carismático, esencial en la predicación redentorista, siguió activo, aunque desde un lugar estable: la Parroquia de Los Dolores. Durante muchos años, y hasta nuestros días, Los Dolores (como se le conoce popularmente) se ha convertido en un lugar donde los fieles se encuentran frecuentemente con el perdón de Dios, a través del sacramento de la confesión y demás sacramentos, sobre todo la Eucaristía y la reconciliación.
En 1990, surgieron nuevas iniciativas misioneras en Honduras, gestadas por las nuevas generaciones de redentoristas netamente centroamericanos. Se abrió la Estación Misionera en Yuscarán, Oropolí y Morocelí, pueblos ubicados al oriente, en el Departamento de El Paraíso.
Dicha Estación Misionera estuvo activa por aproximadamente cinco años. Al cumplirse el período, fue entregada a los sacerdotes diocesanos. En 1995, se abrió una nueva Estación Misionera en Trojes, también en el Departamento de El Paraíso. Esta estación funcionó por un tiempo y hoy es una parroquia, cuya patrona es Nuestra Señora del Perpetuo Socorro.
¿Cuándo llegaron los redentoristas a San Pedro Sula?
En 1998, comenzó la fundación redentorista en San Pedro Sula, en la Colonia Fesitranh, como residencia. El 8 de febrero de 1998 es la fecha inequívoca de la erección canónica de la Parroquia San Antonio de Padua, que hasta la fecha sigue siendo regida por los Misioneros Redentoristas.
Han pasado más de veinticinco años desde aquel inicio, que, entre alegrías, retos, aciertos y desaciertos, luces y sombras, ha impregnado el espíritu misionero redentorista en el corazón de la feligresía.
Sin embargo, la atracción por la vocación redentorista propiamente dicha, es decir, la vocación religiosa y sacerdotal, no ha calado en el corazón de muchas generaciones de jóvenes que han conocido a tantos redentoristas que han pasado por esta parroquia. Solo un joven, en aquellos inicios, se sintió llamado y motivado por el carisma, eligiendo formarse para convertirse en el primer redentorista de la parroquia. Hoy es el párroco y superior de la Parroquia San Antonio de Padua. El P. Egberth Josué Álvarez Álvarez, CSsR, es el primer redentorista sampedrano.
Finalmente, Parroquia San Antonio de Padua: ¡Cuándo otro redentorista?
Victor Manuel González CSsR