La Gran Novena
En 1908, cuando ya se acercaba la fecha del primer año de la fundación redentorista y el establecimiento en San Sebastián, los misioneros pensaron en una manera de agradecerle a la Madre por los favores recibidos.
Ellos pensaron en la novena que se celebraba en todas partes para terminar con la fiesta el día 27 de Junio, día de la Virgen del Perpetuo Socorro. Durante los nueve días de la novena asistió un grupo regular de personas identificadas con el espíritu misionero de aquellos padres franceses. La fiesta, el 27 de junio resultó ser sencilla, con una pequeña procesión alrededor de la manzana de San Sebastián.
Al año siguiente, en 1909, la concurrencia fue mucho más numerosa y año tras año ha venido creciendo el número de devotos y miembros de la Archicofradía de la Virgen del Perpetuo Socorro. Desde allí la novena ya es un acontecimiento para toda la ciudad y sus alrededores, una explosión de fe popular, llegándose a predicar la novena hasta 8 veces al día, llenando los fieles el templo en cada una de ellas. Los temas predicados en la novena, son una catequesis viviente.
Se toman temas muy importantes para la Vida Cristiana y el apostolado, por ejemplo: el matrimonio, la familia, el sacerdocio, la violencia, la reconciliación, los sacramentos, la fe, la vida de María; con un hilo conductor que perseguía en la mente de los predicadores, el que sus oyentes vivan en estado de gracia y fomenten su devoción al Perpetuo Socorro de María, no temiendo invocarlo en los momentos más difíciles.
Actualmente la novena se celebra entre la última semana de junio y la primera semana de julio. Es realmente impactante ver a todo un pueblo que se vuelca en el Santuario, ante la mirada de amor de la Madre, una madre que acoge a todos sus hijos, sin distinciones, de todas clases sociales; una madre que siempre está pendiente de sus vidas, en los momentos de adversidad, siempre dispuesta a socorrernos.
Observar la torre del Santuario, ver flamear la bandera peruana y vaticana, oír el sonido de las campanas y la gran labor misionera de los Redentoristas, atraen a todos los corazones desesperados por ser de Cristo, que buscan el alivio para el alma en Él y nos recuerdan este tiempo de acercarse a través de su Madre, la cual veneramos en esta gran fiesta.
Las peregrinaciones
Desde hace 20 años, los Caballeros de la Virgen del Perpetuo Socorro, encargados de custodiarla y que son los Sucesores de los miembros del Círculo de Jesús Obrero, recibieron una de las tantas imágenes que llegaron al Perú, de la Virgen del Perpetuo Socorro. Todas ellas fueron distribuidas en las zonas de misión, pero quedó una en el Santuario, ornamentando los jardines de la casa de la comunidad. Era una escultura, la cual unos benefactores, estudiantes de Bellas Artes le dieron color y, año a año esta imagen recorre los asentamientos humanos (El Barrio Sur, cuna
de la Devoción por su proximidad al Santuario), colegios, parroquias, capillas, hospitales, de la ciudad de Piura preparando los corazones para la novena y rezando la Súplica perpetua.
La Procesión
La novena finaliza con la Misa de Fiesta, muy concurrida por los piuranos. Por la tarde del mismo día, se realiza la procesión de la venerada Imagen de la Virgen del Perpetuo Socorro. Una talla venida de España, realizada por el artista Enrique Murillo y la cual se ha robado el corazón de los piuranos por los bellos ojos que posee y por los rasgos característicos de las mujeres madres de la región, gran cantidad de fieles con los corazones gozosos, esperan la salida
de la carroza procesional de la Madre de los Ojos Bellos y la acompañan en el recorrido que realiza por las principales calles de Piura. Al regresar a su Santuario es recibida en la plazuela hermanos Meléndez (Frontis del Santuario) en medio de un mar de pañuelos blancos, que flamean al compás de la marinera, típica de la región. Fuegos artificiales detonan, iluminando el cielo de la ciudad, después, se despiden de Ella recibiendo la bendición con Jesús
Sacramentado.
La carroza, en la mayoría de los años se inspira en la temática de la novena. Hemos visto a la Virgen con el mundo a sus pies, la maravilla peruana Machu Picchu, en una barca, acompañada por el Cristo de Corcovado de Brasil y así con diversos motivos que hacen notar la creatividad para embellecer el anda de la Virgen.
Conmemoración mensual
Todos los 27 de cada mes, se recuerda en el Santuario de una manera muy especial a la Virgen del Perpetuo Socorro con motivo de su fiesta. Su imagen preside un altar decorado apropiadamente para la ocasión, y recibe visitas de colegios, instituciones y de todos los feligreses que acuden al Socorro de María. Ese día se prepara una liturgia especial para instruir a todos los cristianos en la búsqueda de una vida coherente, siguiendo el ejemplo de la Santísima
Madre.
Llegada del Icono Peregrino a Piura
Con motivo del Jubileo por los 150 años de la Entrega del Icono de la Virgen del Perpetuo Socorro a los redentoristas, de manos de S.S Pio IX, el Papa Francisco bendijo y envió en Peregrinación por los 5 continentes, copias auténticas del Sagrado Original que se custodia en la Iglesia de San Alfonso en Roma. Uno de ellos termino su recorrido en el Perú, después de haber visitado las distintas comunidades redentoristas en América Latina y el Caribe. Llego a la frontera PerúEcuador en el Mes de Diciembre de 2017, dirigiéndose hacia Piura donde permaneció 15 días, después terminó de recorrer las Viceprovincias de Perú Norte y Perú Sur. Tras ser restaurado por algunos deterioros propios del intenso recorrido, el Gobierno General asigno a la Comunidad Redentorista de Piura, la custodia del Icono Peregrino. En el marco de la Novena del 2018, año en el que se cumplían 110 años de la primera novena en honor a Santa María del Perpetuo Socorro, este Icono fue entronizado para su veneración por el Arzobispo Metropolitano de Piura.
Lic. Gonzalo Jesús García Ruiz,
Docente de Historia, egresado de la Universidad de Piura
