Un ejemplo de longevidad, sabiduría, perseverancia en la vocación e inspiración para la vida cristiana, el P. José Luciano Jacques Penido, C.Ss.R. es considerado uno de los redentoristas más ancianos del mundo, con 98 años de vida, cumplidos el 18 de octubre de 2020. Lucidez, prudencia, generosidad, obstinación y total entrega a Dios son algunas de las características presentes en su camino.
Nacido en Belo Vale (MG), hijo de D. Henrique Marques da Silveira Penido y doña Maria José Jacques Penido, de niño el religioso ya pensaba en convertirse en sacerdote. Las oraciones de su madre y las palabras de su madrina, quien una vez dijo que sería sacerdote, despertaron su deseo de servir a Dios y a la Iglesia. Y así, se incorporó a la Juventud Redentorista de Congonhas (MG), en el año 1934, a los 12 años. Eligió la Congregación del Santísimo Redentor bajo la influencia del Padre Athanasius Geerlings, C.Ss.R., quien, visitando a sus padres, declaró que ¡un día sería un Misionero Redentorista!
En su camino vocacional de casi 80 años como redentorista en la provincia de Río (Brasil), el sacerdote destaca tres momentos importantes: su entrada en el Juvenato di Congonhas, hace 86 años; la votación en Juiz de Fora (MG), 2 de febrero de 1942; y su ordenación sacerdotal en Belo Horizonte (MG), el 20 de julio de 1947.
El Padre Penido pasó por varias comunidades redentoristas y vio crecer y dar muchos frutos a la provincia RJ-MG-ES. Entre las muchas historias y curiosidades, recuerda un viaje misionero, en el que hubo un terrible accidente con un autobús. “Bajé a ver el desastre y 5 metros atrás, al costado de la carretera, pude confesar a una persona y la absolví”, dijo.
En la Provincia de Río ocupó diversos cargos, como docente y miembro de la Juvenate, así como Superior Provincial, de 1962 a 1967. Desde 2011 reside en la Comunidad Redentorista de Río de Janeiro, trabajando en la Parroquia de Sant’Alfonso, donde celebra dos veces Misa durante la semana y es visto por los feligreses como un sacerdote de gran corazón, muy cauteloso, lúcido y disponible para la gente.
El padre Penido, que también es periodista formado por la Universidad Internacional Pro Deo, dice que la evangelización a través de los medios de comunicación hoy es la forma más eficaz de anunciar la Palabra de Dios. Cuando se le preguntó qué significa ser un misionero redentorista en el mundo actual, El sacerdote no duda en su respuesta: “Es vivir hoy el Evangelio y anunciar a Cristo a través de la palabra hablada, escrita, anunciada, proyectada, pero sobre todo mediante el testimonio personal”.
Para el futuro, el P. Penido ve con buenos ojos y espera el proceso de reestructuración y reconfiguración que está atravesando la Congregación Redentorista en todo el mundo de cara a la misión. “Inicialmente habrá algunas dificultades por las costumbres de cada Provincia, pero el resultado final será beneficioso para todos”, dijo el sacerdote.
Con toda su experiencia como religioso, su ejemplo de vida, su constancia vocacional y su celo misionero, el casi centenario Redentorista nos deja un mensaje especial: “Queridos jóvenes, ¡procurad ser generosos con la Palabra de Dios y con vuestra vocación! A nuestros cohermanos les digo: viviremos la vida redentorista, todos los días, como si fuera el primero, el último y el único de nuestra vida ”.
Brenda Melo
Periodista de la Provincia de Rio