El 8 de septiembre de 2022, fiesta de la Natividad de la Santísima Virgen María, Nuestra Madre del Perpetuo Socorro, la Viceprovincia Redentorista de África Occidental se regocijó al celebrar la profesión temporal y definitiva de cuatro cohermanos. En la Santa Misa que se celebró en la Capilla de las Hermanas del Inmaculado Corazón de María en Ejisu en Ghana, los hermanos Michael Adu Obeng CSsR, Thomas Owusu C.SsR. y Joseph Kofi C.SsR., quienes completaron su año de espiritualidad en el Noviciado Redentorista en Kenia, emitieron sus primeros votos como Redentoristas. En su compañía estaba el hermano Michael Kwame Torwoe C.Ss.R., quien hizo sus votos perpetuos convirtiéndose así en redentorista de votos perpetuos.
En su homilía, el Vice Superior Provincial de los Redentoristas de África Occidental, P. Patrice Nyanda C.Ss.R., quien presidió la Misa, invitó a los cuatro hermanos a ver la coincidencia de su profesión religiosa con la Natividad de María como el nacimiento en la Congregación del Santísimo Redentor. Los animó a ser firmes en su vocación ya buscar siempre el ejemplo y la intercesión de la Santísima Virgen María en la vivencia de los votos de pobreza, obediencia y castidad.
Esta alegre celebración reunió a las familias, compañeros de clase, amigos y seres queridos de los hermanos profesos de diferentes partes de Ghana. También estuvo presente el P. Michael Emewere C.Ss.R., Director de Estudiantes de la Viceprovincia Redentorista de Nigeria, quien representó al Superior Viceprovincial de Nigeria. También estuvieron presentes algunos otros religiosos que trabajan en la diócesis católica de Konongo Mampong para rendir homenaje a esta maravillosa celebración.
Hablando en nombre de los nuevos profesos, el hermano Torwoe agradeció a la Conferencia de Redentoristas de África y Madagascar (COREAM) por organizar el programa del segundo noviciado común, al que tuvo el privilegio de asistir en Nigeria en preparación para los votos perpetuos. Por su parte, los tres redentoristas recién profesos expresaron su agradecimiento a través de un canto en kiswahili en honor a María.
Como de costumbre, después de la Misa, los hermanos profesos asumieron su condición de “principales celebrantes” y luego se les unieron otros para las fotos, en las que todos mostraban amplias sonrisas. La alegría del día inundó y encontró expresión en el compartir comida y bebida, así como en la música y el baile, ¡todo para la mayor gloria de Dios!
Por el equipo de comunicación
